EL PALACIO DE LA BÁRCENA Y MISTERIOSO PERSONAJE
A orillas de la carretera que va de Ampuero a Guriezo y a escasa distancia de la villa, se alza el palacio llamado de La Bárcena, en el barrio de este mismo nombre. En él llama la atención el cuerpo abandonado de su torre cuadrangular de tres pisos y el edificio contiguo habitado, todo ello dentro de la gran cerca que se abre en una ostentosa portalada con escudo que escoltan dos figuras de pajes sosteniendo sendas armas de mano, al estilo de como puede verse en la baraja, en la sota de bastos. Se encierra en aquel torreón historias, leyendas y un gran misterio en el nombre de quien habitara la mansión, allá en el siglo XVII, descendiente de una estirpe de navieros -- verás, lector, que esta tierra de Ampuero era tierra de mar-- Era un Espina caballero habitante del palacio en 1545, dueño de la nao "Nuestra Señora de la Concepción", dedicada al transbordo de cargamentos de lanas a Flandes. Don Juan de la Espina, descendiente de aquel naviero, fue un personaje legendario nacido en 1563. Don Francisco de Quevedo se ocupó de este caballero famoso "de muy conocida calidad y solar de aquella cuna de hidalguía de España, muy esclarecido", hábil en el manejo de la lira y la vihuela; y, aunque posiblemente "tratara de las armas" en su juventud, su afición fue la música y lo que hoy llamaríamos su "hobby", la colección de objetos de arte.